¿Por qué es tan difícil encontrarte? Te busco, pero no encuentro el camino que lleva hacia ti. Quizás porque no hay camino, porque el camino no existe, porque el camino se hace al andar. Quizás porque el camino eres tú. O quizás porque apenas hay tiempo para buscar. Estoy demasiado ocupado recorriendo una distancia que ya no sé si me acerca o me aleja. Este Aquí y este Ahora se empeñan en separarnos. El tiempo: ¿problema o solución? ¿Y si cada momento es tan solo un infinito condenado a repetirse en cada instante? Busco frenéticamente las llaves de la dicha bajo la sombra amenazante de un incierto futuro desdichado, sin entender del todo en qué consiste semejante cerradura. La pregunta, entonces, es hasta cuándo. ¿Hasta cuándo seguir amándote y no amándote? ¿Hasta cuándo seguir congelándonos en este fuego inacabado sin principio ni final? ¿Hasta cuando seguir siendo sin ser? ¿Hasta cuando seguir no siendo? ¿Hasta cuando preguntarme si seré, serás, seremos? ¿Hasta cuándo?


[Canción: "Descubriéndote", de Rosana (Lunas Rotas)]