I like this song a lot. It brings back a lot of memories. During my third year as an undergrad in my university in Spain, I had to work in a lab project that involved building an audio processing device. I used to test my prototype by plugging in an old walkman with a cassette that contained this song, and therefore now, when I hear this music, my mind goes back to those days. A few years later, my parents and my brother went to visit me in Paris during the summer. We took a local train to go to Eurodisney, and while we were in one of the wagons, a street musician came in and started playing the same tune. We had a lot of fun that day. Even during my time in the US, the song has continued to play an important role at times when I’ve listened to it and it has helped me feel a little bit stronger by helping me realize that I have never really been as alone as I may have felt. You are never really alone if there is at least one person who loves you, and if you can be certain that - no matter what – that person will always stand by you. When it comes to the version shown in the video below, there are two things that I do particularly like. On the one hand, it proves that sometimes the best musicians are not necessarily those who play in the most expensive and “distinguished” auditoriums. On the other, it shows how beautiful it is to listen to people from all over the world singing together as one. Music as a universal language.
Esta canción me gusta mucho. Me trae un montón de recuerdos. Durante mi tercer año de universidad en España, por ejemplo, tuve que trabajar en un proyecto de laboratorio en el que se nos pedía diseñar un sistema electrónico para el procesado de audio. Recuerdo que yo solía hacer las pruebas enchufando a mi placa un walkman de los antiguos, con una casete en la que había grabado esta canción. Cuando escucho la musiquilla, me acuerdo de aquellos días de trenes, angustias, y horas interminables en el laboratorio. Unos años después, mis padres y mi hermano fueron a visitarme a París cuando yo estaba estudiando allí. Recuerdo que un día tomamos un tren de cercanías para ir a Eurodisney y en nuestro vagón se subió un músico ambulante que se puso a tocar la misma cancioncilla. Aquel dia lo pasamos muy bien. Incluso durante mi etapa en EEUU, este “Stand by me” ha seguido jugando un papel importante, sobre todo en algunos momentos en los que he llegado a sentirme demasiado solo. Al final, uno se da cuenta de que mientras haya una sola persona que te quiera de verdad, nunca se está solo del todo, ni aunque vivas en una isla desierta. Esa es, para mí, la filosofía de la canción. La gente que te quiere, te da fuerzas para enfrentarte al mundo. En lo que respecta a la versión que aparece en el video adjunto, dos cosas me llamaron especialmente la atención. Por un lado, demuestra que los mejores músicos no siempre son los que tocan en los auditorios más caros y elitistas. Por otro lado, me resulta muy bonito escuchar a gente de todos los rincones del mundo cantando con una sola voz. La música, lenguaje universal.
